Capítulo IX. El continuo desigualdad-violencia como perspectiva de conocimiento para la producción de bienestar, una reflexión desde el caso mexicano
| Author | Jorge Arzate Salgado |
| Profession | Universidad Autónoma del Estado de México, México |
| Pages | 229-256 |
CAPÍTULO IX
EL CONTINUO DESIGUALDAD-VIOLENCIA COMO
PERSPECTIVA DE CONOCIMIENTO PARA LA
PRODUCCIÓN DE BIENESTAR, UNA REFLEXIÓN DESDE EL
CASO MEXICANO
EL CONTINUO DESIGUALDAD-VIOLENCIA COMO PERSPECTIVA DE CONOCIMIENTO PARA LA PRODUCCIÓN DE BIENESTAR...
Jorge Arzate Salgado
Universidad Autónoma del Estado de México, México
1. INTRODUCCIÓN
Las desigualdades sociales y económicas, es decir, las diversas formas de ex-
plotación económica, exclusión social y discriminación, son uno de los principales
problemas históricos en los países de América Latina; en el caso de México, la
concentración de salarios y riqueza, así como el racismo y la exclusión de ciertos
grupos sociales en campo y ciudades es una realidad difícil de revertir; así por ejem-
plo, según el Informe 2022 sobre riqueza mundial de Credit Suisse, 30.2 por ciento
de la riqueza era concentrada por los adultos con mayores recursos, de esta forma
México era economía con mayor número de multimillonarios en América Latina y
la segunda con la peor distribución de la riqueza (Villanueva, 2022).
Las formas de violencia en México han tenido un signi cativo aumento en lo
que va del siglo XXI, a tal punto de que en la última década se habla de una crisis
de violencia en el país: “A lo largo de la última década, México ha sufrido una crisis
de violencia sin precedentes que ha puesto en entredicho la gobernabilidad de
múltiples regiones del país y causado graves afectaciones en el tejido social” (Flores,
2018, xi); las formas de la violencia presentan un amplio espectro, que van desde la
delincuencia común en las ciudades, la guerra de baja intensidad entre grupos del
crimen organizado y las fuerzas del estado, hasta la violencia intrafamiliar hacia las
mujeres y el aumento de los casos de feminicidio en todo el país.
En siglo XXI se construye una realidad social en las que las desigualdades
sociales y económicas con uyen con las formas de violencia de una manera, sino
nueva, al menos sí novedosa, por las características contextuales del país, es decir: en
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democracia (aunque se trate de una democracia realmente joven), con una economía
diversi cada y cada vez más importante a nivel internacional como economía expor-
tadora (el país es, sin duda, el que ha logrado una mejor diversi cación económica
e industrialización en toda Iberoamérica, derivado de su asociación estratégica con
las economías de Estados Unidos y Canadá), y con una sociedad, a pesar de los
rezagos en la materia, que ha tenido, en buena medida, acceso a la educación básica
y superior. Todo lo cual constituye una enorme paradoja para el país: ¿por qué razón
las estructuras de desigualdad y las formas de violencia se imponen a una sociedad
que tiene avances importantes como economía y sociedad moderna democrática?
Esta realidad que se configura como un régimen social u orden social de
desigualdad-violencia, en donde, la democracia y sus instituciones conviven de
manera natural con formas de desigualdades sociales y económicas; a la vez que
el estado y la sociedad civil es permisiva con la proliferación de múltiples formas
de violencia; lo cual representa en sí mismo un reto para la democracia y para los
procesos de modernización económica. Más allá de una discusión sobre la natu-
raleza de la democracia en el caso mexicano, creemos que un régimen social de
desigualdad-violencia es el principal obstáculo para atacar las mismas desigualdades
económicas y sociales, así como para intervenir en las formas de violencia realmente
existentes; en el fondo del asunto se encuentra una invisibilización de la desigualdad-
violencia como sistema social y cultural, así como por la imposibilidad del estado
y sus instituciones para hacer frente a las violencia(s), ya sea por corrupción en sus
estructuras o por ine ciencia.
Para las ciencias sociales es de vital importancia comprender la naturaleza de
un régimen social de desigualdad-violencia como el que se con gura en México;
para ello requiere de herramientas teóricas y metodológicas que permitan pensar,
describir, explicar su producción/reproducción, así como dar cuenta de sus efectos
en las distintas clases sociales, territorios, y sus efectos en el modelo democrático y
de ciudadanía del país.
En este capítulo se re exiona sobre algunas claves epistemológicas e histórico-
sociales del continuo desigualdad-violencia; todo con el objetivo de acuñar de mejor
forma su sentido como herramienta de investigación sociológica que permita com-
prender la producción/reproducción de la desigualdad y la violencia en contextos
como el mexicano1; en donde la precarización de grandes contingentes sociales
avanza y se profundiza, a pesar de la existencia de un contexto jurídico e institucional
democrático; creemos que este conocimiento es indispensable para plantear, a contra
corriente, formas de bienestar en torno a la idea democrática de bien común y de
cohesión social; así como para generar nuevas estructuras y superestructuras en
1 Esta argumentación amplía el contenido del concepto de continuo de desigualdad-violencia
desarrollado de manera previa en: Arzate, 2018; y Arzate, 2022.
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