Respuestas penales a la victimización sexual: hacia un nuevo paradigma
| Author | Daniel Montesdeoca Rodríguez |
| Pages | 209-234 |
RESPUESTAS PENALES A LA VICTIMIZACIÓN
SEXUAL: HACIA UN NUEVO PARADIGMA
Dr. Daniel Montesdeoca Rodríguez
Profesor Contratado Doctor de Derecho Penal
Director de la Cátedra UNESCO de Derechos Humanos y Democracia
Universidad de Las Palmas de Gran Canaria
ORCID 0000-0001-7872-6002
SUMARIO: 1. INTRODUCCIÓN. 2. CONNOTACIONES ACTUALES DE LA VIC
TIMIZACIÓN SEXUAL. 3. LOS DELITOS DE NATURALEZA SEXUAL EN EL
CÓDIGO PENAL ESPAÑOL. 4. EL ESTATUTO DE LA VÍCTIMA COMO ESCE
NARIO PRECEDENTE DE PROTECCIÓN. 4.1 APROXIMACIÓN AL ESTATUTO
JURÍDICO DE LA VÍCTIMA. 4.2 LA CONSOLIDACIÓN DE LOS DERECHOS DE
LAS VÍCTIMAS. 4.3 IMPACTO DEL ESTATUTO JURÍDICO DE LA VÍCTIMA EN
EL ORDENAMIENTO JURÍDICO PENAL. 5. CONSIDERACIONES ACERCA DE
LA LEY ORGÁNICA 8/2021 DE 4 DE JUNIO, DE PROTECCIÓN INTEGRAL DE
LA INFANCIA Y LA ADOLESCENCIA FRENTE A LA VIOLENCIA. 6. A MODO
DE CONCLUSIÓN
1. INTRODUCCIÓN
El papel de la víctima en la justicia penal ha evolucionado a lo largo del tiempo.
Anteriormente, la víctima se consideraba principalmente como un mero testigo, y
su papel en el proceso penal era principalmente el de proporcionar pruebas y tes-
timonios para ayudar a probar la responsabilidad penal del autor o victimario. Sin
embargo, con la evolución de nuestro ordenamiento jurídico se ha comenzado a re-
conocer su protagonismo, avanzando en el conocimiento del impacto del delito y una
mayor consideración de sus necesidades y derechos, especialmente aquellas que han
sufrido delitos de naturaleza sexual.
Esta evolución ha propiciado una mayor comprensión de sus necesidades y dere-
chos, teniendo las reformas legales el objetivo, de garantizar que las víctimas reciban
un tratamiento justo y adecuado en su participación en nuestro sistema penal.
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2. CONNOTACIONES ACTUALES DE LA VICTIMIZACIÓN SEXUAL
Las conductas típicas que junto contra los delitos contra la vida, tienen un efecto
devastador en las víctimas, son sin duda aquellas que se conectan con los delitos de
naturaleza sexual.
Conforme ha ido avanzando la sociedad, las connotaciones de la victimización
sexual han ido también modicándose hasta convertirse en un asunto de profunda
importancia y sensibilidad.
A medida que avanzamos hacia una mayor conciencia sobre la igualdad de géne-
ro y los derechos de las personas, deviene esencial aproximarnos a la realidad de las
cuestiones relacionadas con la victimización sexual.
Se hace necesario reconocer que la victimización sexual abarca un amplio espec-
tro de situaciones que afectan fundamentalmente, a mujeres y a niñas, y que lejos de
lo que puede entenderse, no se trata únicamente de violencia física, sino que también
incluye daños psicológicos y emocionales, produciendo un estado complejo de repa-
rar.
En el pasado, estas cuestiones a menudo se minimizaban o se ignoraban, lo que
dejaba a las víctimas sin el apoyo necesario y la justicia que merecían. Sin embargo,
en la actualidad, la sociedad está demostrando una mayor disposición a escuchar a
las personas que han experimentado victimización sexual, lo que es un paso funda-
mental hacia la erradicación de la cultura de la violación y la impunidad.
El movimiento #MeToo ha sido un catalizador importante en esta evolución cul-
tural. Ha permitido que miles de mujeres compartan sus experiencias y denuncien a
sus agresores, lo que ha ayudado a visibilizar la magnitud del problema. A través de
las redes sociales y otros medios de comunicación, el movimiento ha generado un
gran impacto, desplegando las condiciones propicias para que las víctimas compar-
tan sus historias y busquen apoyo mutuo.
Asimismo ha llevado a un aumento en la visibilidad del problema, cuestionado las
estructuras de poder que permiten la impunidad de determinados actos, que históri-
camente normalizados han producido un enorme daño a las víctimas.
No obstante, en los últimos años, se están realizando esfuerzos para mejorar los
procesos de denuncia y garantizar que las víctimas sean tratadas con respeto y consi-
deración en las instituciones judiciales y sociales, promoviendo cambios legislativos
en este sentido.
Además, la educación y la prevención son fundamentales para abordar las con-
notaciones actuales de la victimización sexual, no solo en las escuelas, sino también
en los lugares de trabajo y en el entorno familiar, al objeto de facilitar una cultura de
respeto, comprensión de la dimensión del problema y empatía.
Sin embargo, no debemos olvidar que la educación sobre la igualdad de género y
los derechos humanos debe comenzar desde una edad temprana, para que las futuras
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