El delito del cuerpo. Violencias sistémicas contra la ciudadanía trans e intersex en (y por) el Estado español

AuthorDaniel J. García López
Pages129-146
© Editorial UOC Capítulo IV. El delito del cuerpo…
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Capítulo IV
El delito del cuerpo. Violencias sistémicas
contra la ciudadanía trans e intersex
en (y por) el Estado español
Daniel J. García López. Universidad de Granada
1. Introducción
Maniatada a los barrotes de la cama de un hospital. Pies
y manos formando una X y solo su boca entreabierta por la
medicación, amenaza con un grito. Amenaza que no es capaz de
arrancar ni un suspiro. Está vacía. La han dejado vacía. La tarde
anterior la durmieron llorando. A la mañana se ha despertado
así: maniatada a los barrotes de la cama de un hospital y su bajo
vientre cosido. Ya no hay nada. Ni siquiera el dolor físico puede
ocultar el recuerdo. Su cuerpo ya no es su cuerpo. Su cuerpo es
un trozo de carne cosido y repleto de heridas. Su cuerpo ya no
es su cuerpo. Su cuerpo ahora es de otros, de los que decidieron
que sus genitales no poseían la forma y el tamaño adecuado, que
no cumplían con la norma. La sangre se enreda en cada una de
sus palabras porque los bisturís, de punta a punta de su garganta,
hablaron.1
No. No se trata de una tortura ejecutada sobre una persona
disidente en un régimen dictatorial. Estamos hablando de la
España de los años noventa. De hace poco más de dos décadas.
Estamos hablando de un hospital público. Estamos hablando de
1. Se trata de un caso real. Por motivos de protección de su intimidad, se omite
cualquier dato de la persona que pudiera darla a conocer.
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una persona menor de edad: tan solo tenía doce años. Cuando
entró en aquel quirófano, sus derechos fundamentales fueron
suspendidos. Ni derecho a la integridad física, ni derecho al libre
desarrollo de la personalidad, ni derechos sexuales y reproducti-
vos, ni dignidad. Los derechos que nos garantizan una vida vivi-
ble quedaron a las puertas de aquella sala. En su interior reinaba
la anomia, el vacío, el (bio)estado de excepción que ha devenido
regla (García López, 2018, págs. 234-236).
Lo que podría pensarse como una excepción, como un caso
singular, lamentablemente es una realidad cotidiana. Se trata de
una violencia normalizada, de una violencia sistémica oculta bajo
los contornos de la violencia explícita.2 Los horrores de las gue-
rras, de los atentados, de las cargas policiales, etc., captan de tal
modo nuestra atención que por detrás, oculta, ella es atada a una
cama de un hospital y mutilada por ser una persona intersex. Este
es el delito de su cuerpo.
En este capítulo quisiéramos centrar nuestra atención precisa-
mente en esta violencia normalizada, asumida como normal, como
cumplimiento de la norma. Una violencia orquestada y planificada
que, en un Estado que se dice democrático y defensor de los
Derechos Humanos, se está ejecutando diariamente sobre las
personas transexuales e intersexuales, sobre la ciudadanía trans
e intersex. Si bien es cierto que el Estado español fue de los pri-
meros en realizar reformas legislativas enfocadas en la población
LGBTI, como fue la Ley 13/2005 que modificó el Código Civil
en materia del derecho a contraer matrimonio,3 o tipificar los
2. De la configuración de la violencia sistémica, normalizada, frente a la violencia
explícitaosubjetivasehaocupadoŽižek (2009).
3. En otro texto hemos defendido la eliminación de la institución del matri-
monio, de todo matrimonio, por mantener los contornos del heteropatriarcado
(García López, 2016, págs. 186-197).

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