Simulaciones diplomáticas para la adquisición de competencias deontológicas: el modelo de naciones unidas

• Author: Antonio Quirós Fons
• Pages: 145-164

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CAPÍTULO VIII

SIMULACIONES DIPLOMÁTICAS PARA LA

ADQUISICIÓN DE COMPETENCIAS DEONTOLÓGICAS:

EL MODELO DE NACIONES UNIDAS

ANTONIO QUIRÓS FONS

Universidad Europea de Valencia

1. INTRODUCCIÓN

Capacitar deontológicamente a los estudiantes implica hacerles conocer

los riesgos a los que se verán expuestos en la vida profesional. Sólo así

aplicarán los conocimientos, actitudes y habilidades previamente adqui-

ridos. Entonces podrán saber qué se debe hacer y creerán en la necesidad

de hacer lo correcto.

El presente estudio pretende exponer experiencias exitosas de innova-

ción educativa mediante gamificación para la adquisición de conoci-

mientos, actitudes y habilidades en ámbito ético profesional. Concreta-

mente, actividades y herramientas de simulación gamificada para expe-

rimentar los riesgos que implican determinadas decisiones. También se

ha evaluado la eficacia de la herramienta en ámbito académico.

En las asignaturas de Prácticas, tanto de Derecho como de Relaciones

Internacionales, se ha detectado una importante necesidad: los estudian-

tes tienen dificultades para aplicar las competencias deontológicas o éti-

cas propias de su profesión en las primeras situaciones reales bajo su res-

ponsabilidad. Mediante este estudio, se enumeran algunas herramientas

de simulación gamificada que han sido empleadas en los Grados men-

cionados y que se han demostrado como adecuadas para el aprendizaje

de dichas competencias. Esas herramientas ofrecen un análisis más com-

pleto al estudiante en el proceso de toma de decisiones de alta responsa-

bilidad ética y legal, acompañado siempre de un importante factor de

interculturalidad (Quirós Fons, 2020), propio de la Universidad

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Europea de Valencia, que aglutina numerosas nacionalidades, tanto en-

tre estudiantes como entre docentes.

En investigaciones anteriores del grupo de investigación del autor ya se

demostró la mayor eficacia conseguida en el proceso de aprendizaje ac-

tivo mediante el uso de la gamificación (Martí Parreño et alii, 2016),

pero no mediante e-learning (Martí Parreño et alii, 2018). Ello se debe

a que, en el aprendizaje electrónico, la transferencia de conocimiento es

a menudo unidireccional. A tal efecto, son muy ilustrativos los últimos

resultados del grupo de investigación sobre laboratorios virtuales de la

Universidad Europea de Valencia (Serrano Pérez, 2019), donde queda

patente que los estudiantes prefieren el uso de laboratorios reales frente

a los virtuales. La complejidad de las competencias éticas profesionales

en términos algorítmicos haría más dificultosa la aproximación virtual,

que puede ser objeto de un estudio posterior.

El estado de necesidad generado por la pandemia en el último año ha

prescindido de los resultados expuestos, sobre todo en áreas de conoci-

miento de Ciencias de la Salud: antes de la pandemia, los entornos de

simulación asociados a las aplicaciones de realidad virtual eran un re-

curso financieramente viable para implantación y desarrollo de planes

de estudio en Salud; en el último año, por motivos de salud pública, han

sido el único modo viable para garantizar el aprendizaje mínimo en esos

estudios. Sin embargo, los estudiantes de Salud siguen prefiriendo el

contacto físico (Mariscal et alii, 2020).

De cualquier modo, la simulación, en sentido amplio, se entiende en la

actualidad referida principalmente a las Ciencias Básicas, Técnicas y de

Salud, y además en modo virtual (Curcio et alii, 2016; Fernández,

2017). No cabe duda de que, en esas áreas de conocimiento, la simula-

ción virtual permite recurrir a escenarios difícilmente reproducibles me-

diante la simulación presencial. Piénsese en un incendio o en un acci-

dente radioactivo. Sin embargo, en simulaciones de Derecho o Relacio-

nes Internacionales, esos escenarios no son los que deben reproducirse

con fidelidad, sino la toma de decisiones que puedan provocar esas cir-

cunstancias fortuitas (inundaciones, terremotos) o provocadas (actos te-

rroristas, crisis nuclear como la de 1963 en Cuba). El núcleo de