Sistema finalista
| Author | Gianni Egidio Piva Torres, José Sebastián Cornejo Aguiar, Ivan Pedro Guevara Vasquez |
| Pages | 83-99 |
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| DERECHO PENAL GENERAL | CAPÍTULO V |
Sistema finalista
SUMARIO: 1. Generalidades. 2. Orígenes del finalismo. 3. Estructura faltista del delito.
4. Acción. 5. Acción y resultado. 6. Función y consecuencia del concepto de acción. 7.
Omisión. 8. Tipo penal. 9. Tipo penal doloso. 10. Tipos culposos y omisivos. 11. Reacción
tipo/antijuridicidad. 12. Causas de justificación.
1. Generalidades
El sistema finalista como doctrina filosófica, implica dos tesis:
• El mundo se organiza con vista a un fin.
• La explicación de todo acontecimiento (fenómeno) del mundo consiste
en aducir el fin hacia el que el se dirige.
Estas dos tesis se encuentran frecuentemente unidas o confundidas en-
tre si, aunque a veces sucede que una se da separada de la otra y es tomada
aisladamente del conjunto.
En realidad, la primera se refere a la organización ontológica del mundo,
y la segunda, a las formas de conocimiento (teoría del conocimiento). Así de
acuerdo con la posición filosófica que se sustente en ontología o en la teo-
ría del conocimiento, puede resultar situaciones contradictorias acerca de la
adopción de estas tesis, lo que explica la aceptación de una en detrimento de
la otra, o la aceptación de ambas.
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ESTUDIOS DE DERECH O PENAL GENERAL Y ESPECIAL E N EL DERECHO HISPANO
GIANNI EGIDIO PIVA TOR RES | JOSÉ SEBASTIÁ N CORNEJO AGUIAR | IVAN PED RO GUEVARA VASQUEZ
2. Orígenes del finalismo
JUAREZ TAVAREZ40, señala: «La concepción que efectivamente, marco la
filosofía del finalismo debe ser atribuida a Aristóteles, reproducida de forma magis-
tral por SANTO TOMAS DE AQUINO». Postula SANTO TOMAS DE AQUI-
NO41 : «Todo lo que existe en la naturaleza existe para un fin, el fin es la subsistencia
o forma o razón de ser de la propia cosa». En SANTO TOMAS DE AQUINO se
afirma efectivamente la independencia entre la pura causa impulsora del acon-
tecimiento y el fin de la guía a la actividad: la necesidad con que la flecha se
mueve y por la cual se dirige el blanco, le fe imprimida por quien la lanza y
no pertenece a la flecha.
Aunque en SANTO TOMAS DE AQUINO, se nota nítidamente los con-
tornos del finalismo, respeto a un cierta confusión entre este y la teología.
En efecto, al identificarse finalidad con causalidad, se parte básicamente del
principio de que quien imprime la primera causa es Dios, y el hombre apenas
realiza acciones a semejanzas de aquel. O mejor dicho: el universo, en su tota-
lidad, esta subordinado a un fin único, que es Dios.
La verdadera disuasión entre finalismo y teología solo viene a encontrar
a poyo en la filosofía a partir de KANT y de HEGEL. Con HEGEL esta con-
sagrada la separación: El finalismo será un concepto inmanente a la propia
naturaleza, independiente del entendimiento extrahumano que lo señale.42 En
KANT hay, con todo cierto compromiso causal pues, si por un lado se con-
forma enteramente con la primera tesis de que la organización del mundo es
finalista, se niega, por otro lado que la explicación de los fenómenos (teoría
conocimiento) puede ser reducida siempre según esa finalidad. A contrario,
afirma que esa explicación puede ser a veces, puramente causal. El juicio fi-
40 JUÁREZ TAVARES. Teorías del Delito. Editorial Hammurabi. Buenos Aires Argenti-
na. 1983.
41 SANTO TOMAS DE AQUINO. Suma de Teología. Editorial atolica. Madrid España.
1960.
42 HEGEL. GWF. Ciencia de la Lógica. Si sello Editorial. Buenos Aires Argentina.
1968.
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