Evolución histórica de los estudios de derecho en Holguín

AuthorOrlando William Naranjo Saavedra - Ricardo Silva Zaldívar
PositionDepartamento de Asesoría Jurídica de la Dirección Provincial de Planificación Física - Profesor de la Facultad de Derecho de la Universidad de Holguín
Introducción

El ser humano es la única especie que requiere una educación y esta última lleva implícita la disciplina y la instrucción.1 De ahí que la Educación represente un proceso social complejo de carácter histórico, concreto y clasista, mediante el cual tiene lugar la transmisión y la aprobación de la herencia cultural atesorada por el ser humano.

Desde épocas antiguas se ha procurado dotar a las noveles generaciones de los conocimientos necesarios para el desarrollo de sus habilidades cognoscitivas en función del avance y perfeccionamiento de las disímiles sociedades. Para los poetas latinos la Alma Máter era la Patria y para los escritores modernos es la Universidad. Como madre nutricia se levantan los centros de enseñanza superior en cualquier lugar del mundo; en la versión cubana la grandeza no es menos.

La enseñanza del Derecho ha transitado y evolucionado hasta nuestros días, estando presente en las primeras universidades creadas, como una de las carreras más indispensables dentro del desarrollo político-económico y social de la humanidad.

En Cuba también se ha enseñado Derecho en los distintos centros educacionales durante todo el devenir de la historia patria: Universidad de La Habana (1728), Seminario de San Basilio El Magno (1722), Seminario de San Carlos y San Ambrosio (1774), y las Universidades de Villanueva (1946), de Oriente (1947), de Las Villas (1948) y la de Camagüey (1975).

En Holguín existió la Universidad del Norte de Oriente, con la anuencia de la Ley 5/1956;2 la Carrera de Derecho estuvo entre las fundadoras de esta institución académica. Acreditadas personalidades de la sociedad holguinera integraron el claustro de profesores de la Facultad de Derecho y Ciencias Comerciales hasta el cierre de esta Casa de Altos Estudios como implementación de la Ley 11/1959.3

Durante un largo periodo los jóvenes holguineros estudiaron Derecho en otros centros educacionales distantes del territorio. La Universidad de Camagüey permitió que se impartiera el segundo semestre del Tercer Año en la localidad entre los años 1995 y 2000.

El Departamento de Derecho, adscripto a la Facultad de Humanidades, surgió en el año 2001 al amparo de los cambios educacionales implementados por el Programa de Trabajadores Sociales. Comienza de esta manera a estudiarse la Carrera nuevamente en Holguín. La fundación de la Facultad, el 24 de febrero de 2009, afianzó el deseo de dotar a los holguineros de su propia escuela de Derecho.

El estudio de los fenómenos locales es una tendencia actual que bien puede ser revertida en beneficio de la comunidad. La inserción de la carrera de Derecho en la vida económica, política y social de la provincia Holguín, con sus declives y momentos cumbres, ha contribuido a la gestación de un profesional con matices peculiares.

Génesis de la Ciudad y de sus primeras instituciones docentes

Holguín inició la historia escrita de la nación y del continente americano con el hecho más importante de la Edad Moderna, la llegada del Almirante Cristóbal Colón a nuestras costas el 28 de octubre de 1492.4 Una recreación del hecho refleja: “En la barca de la nave capitana, Colón remonta el río; no se cansa de admirar la gran belleza de los contornos. Según se dice es en este momento cuando exclama la frase célebre: Esta es la tierra más hermosa que ojos humanos hayan visto.5

Los orígenes de Holguín se remontan a la creación del Hato de San Isidoro,6 en la distante fecha de 1545, por el capitán de origen extremeño García Holguín, en la zona conocida como Cayo Llano, lugar que estaba limitado por los ríos Fernando (Marañón) e Isabel (Jigüe).

Se ofició la primera misa en la Iglesia Parroquial el 4 de abril de 1720, hecho que marcó la fecha fundacional del pueblo de San Isidoro de Holguín.7 No fue hasta el 18 de enero de 1752 que se le otorgó el título de Ciudad y Tenencia de Gobierno. Desde entonces esta demarcación territorial ha pretendido dotarse de un espacio dentro del país. No es de asombrar la vehemencia otorgada por sus pobladores al cultivo de la inteligencia y la urbanidad.

Durante el periodo de República Mediatizada se crearon centros educacionales como el de “Los Amigos” (1902),8 donde el egresado obtenía el Bachiller; el colegio “José Martí”, allí se cursaba la enseñanza elemental y la segunda enseñanza; del mismo modo se establecieron colegios católicos como: el “Lestonac” (1927) instaurado por las religiosas de la Compañía de María, el Sagrado Corazón fundado por la Congregación de las Hermanitas de los Pobres y el colegio Montesinos creado por la Dra. Isabel Montesinos.9

Para 1940 se establece el colegio “Academia Lavernia” para el estudio del Comercio y la teneduría de libros. El Instituto de Segunda Enseñanza surge en 1937 y la Escuela de Comercio en 1958. 10 En 1952 surgió la Sociedad Amigos de la Cultura que pretendió contribuir a erradicar el analfabetismo en la ciudad que afectaba al 36% de la población.

La influencia norteamericana en la cultura cubana y específicamente en el ámbito educacional era palpable ya que:

La enseñanza práctica y el aprender-haciendo se convirtieron en el modelo pedagógico para alcanzar la cima del éxito personal. Precisamente, la crítica al pragmatismo se sustentaba en que los valores espirituales e intelectuales eran sacrificados por esta filosofía, en nombre de la eficacia y el éxito. En el ámbito social y laboral en Cuba se abrió paso a una mentalidad que asociaba al hombre de éxito con la conquista del bienestar material, el empleo remunerado, las posibilidades de consumo y el triunfo en los negocios, conquistas que reafirmaban las propuestas subyacentes en esa filosofía aunque también se sustentaban en el utilitarismo y el materialismo más chato. 11

Múltiples factores influyeron en la no existencia de un centro de educación superior; situándose entre las causales, las características propias de la población, así como los tropiezos de anteriores divisiones político-administrativas, que renegaban, por decirlo de alguna manera, a los ciudadanos del interior del país.12

Estudios de Derecho en la Universidad del Norte de Oriente

La población de la región holguinera era seis veces mayor a la de 1899, según los datos ofrecidos por el Informe General del Censo de Población, Vivienda y Electoral correspondiente al año 1953; reflejo de lo planteado anteriormente lo constituye el hecho de que la densidad poblacional durante la Intervención norteamericana era de 13.8hab/km2 y para los inicios de la década de los 50 era de 55.6hab/km2.13 Varias razones provocaron ese crecimiento demográfico: el estrepitoso proceso inversionista del primer cuarto de siglo en la República y el constante flujo migratorio, contribuyeron al estallido demográfico en el territorio holguinero. 13

El líder parlamentario Rafael L. Díaz-Balart y Gutiérrez15, Representante por el Partido Acción Progresista, fue un promotor, desde el Congreso de la República, de la concreción del proyecto de Universidad en Holguín. Esta acción fue considerada como un triunfo dentro de su carrera política, favorecido por las circunstancias de la época.

El 9 de octubre de 1955 se produjo la apertura del curso del Centro Universitario del Norte de Oriente, extensión del Universidad Masónica de La Habana “José Martí Pérez”, en el patio central del Instituto de Segunda Enseñanza.16 El acto estuvo presidido por el Rector de la Universidad Masónica Dr. José T. Oñate, el Coronel Aquilino Guerra González y el Rector del Centro holguinero Dr. Pedro S. Peñaranda Díaz. El Himno Nacional fue ejecutado por la Banda del Regimiento No. 7 “Calixto García”. Contó con una matrícula inicial de 500 alumnos. 17

Fue el Dr. Antonio Díaz Fernández, profesor de la Escuela de Derecho del Centro Universitario recién instaurado, quien pronunció la Oración Martiana que estaba encomendada al Dr. Rafael Díaz-Balart, por encontrarse este último indispuesto. Un corto circuito, que dejó a oscuras el lugar por unos instantes, no pudo mellar la oratoria emocionada del jurista. Correspondió al Rector Oñate dejar oficialmente abierto el curso 1955-1956.

Se requería para matricular poseer el título de Bachiller, Maestro Normalista, el de Contador de las Escuelas de Comercio o el ingreso obtenido en otras universidades oficiales. El diario Norte profetizaba en una de sus líneas: La Universidad de Holguín ha quedado definitivamente consolidada para bien de Cuba. 18

El Consejo Universitario de la Universidad de La Habana, protestó contra la aprobación del proyecto de la Cámara de Representantes, de subvención estatal a las universidades Nacional Masónica “José Martí” (privada), Villanueva (privada), y Norte de Oriente (sin vigencia legal), mientras el Estado adeudaba millones de pesos a la Universidad de La Habana, e incumplía con el precepto constitucional de darle el 21/4% del presupuesto nacional.

Por Decreto Presidencial de Fulgencio Batista19 se instituyó, el 13 de junio de 1956, mediante la Ley No. 5,20 la Universidad del Norte de Oriente. Mucho se discutió de la oficialidad de la universidad holguinera, pues algunos la consideraban ilegal debido a que Holguín no era capital de provincia en ese entonces. Esta opinión venía dada por la existencia en otras provincias de una sola universidad como era el caso de la “Rafael Morales” en Pinar del Río.

Notables profesores formaron parte de su claustro. Esta Universidad pretendió trascender por la calidad de sus futuros egresados que contrastaría con las esperanzas elitistas de las clases interesadas en el triunfo educativo de esa institución. El Dr. Oscar Tamayo Ruiz, Decano del Colegio de...

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