Agradecimientos

• Pages: 23-24

AGRADECIMIENTOS

Primeramente quisiera expresar mi más sincero y profundo agradecimiento a tres personas

que han sido de indudable importancia en mi vida, tanto privada como profesional, y que sin

ellos este trabajo de investigación que tiene como origen una tesis doctoral cursada en el Pro-

grama de Doctorado en Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Educación

a Distancia (UNED) no hubiera sido posible:

A mi directora de tesis la profesora doctora Marina Vargas Gómez-Urrutia, quien fue la inuencia

más importante de mi juventud, cuando fue mi profesora de derecho romano en el primer año de li-

cenciatura en derecho en la Universidad Panamericana en Guadalajara, Jalisco, México. Ella me infun-

dió el amor al derecho, un interés desmesurado por el derecho romano y un germen de curiosidad por

el derecho internacional privado. Desde esos tiempos, me brindó su amistad incondicional y pasamos

tantos momentos gratos en la cálida ciudad de Guadalajara. Asimismo, le agradezco innitamente el

haber aceptado el tema de la tesis, que ha sido arduo, y en ocasiones muy espinoso, así como por su

paciencia al esperar los adelantos de la tesis mientras trabajaba tiempo completo en la Conferencia

de La Haya de Derecho Internacional Privado (HCCH). Sin ella este trabajo de investigación no

hubiera tenido el riguroso sello de calidad, excelencia y lógica jurídica “Marina Vargas” que le es tan

característico. Además de su gran sabiduría y conocimiento en temas de niñez. No existen palabras

para agradecerle las numerosas reuniones que tuvimos por Microsoft Teams, conectándonos Espa-

ña-Países Bajos, y sus acertados comentarios y guía durante todos estos años.

Al anterior Secretario General de la HCCH, Hans van Loon, quien fue un jefe ejemplar por

ocho años, durante los cuales me enseñó las grandes expectativas que se depositan en un funcio-

nario internacional, el trabajo inagotable de la HCCH, los secretos de la diplomacia, así como

la humildad y el buen trato. A él le agradezco su generosidad por aceptar leer y discutir cada pá-

gina, cada renglón, de la tesis que dio origen a este trabajo, por las innumerables reuniones que

tuvimos en su ocina en el edicio de la Academia de Derecho Internacional de La Haya con

una buena taza de rooibos y unos deliciosos chocolates. A él también le agradezco su amistad y

sus comentarios francos y sabios. Su conocimiento sobre el tema es innito. El presente trabajo

también cuenta, sin duda, con su sello.

Al profesor doctor Jorge Alberto Silva Silva, actualmente jubilado de la Universidad Autónoma

de Ciudad de Juárez, México, y precursor del derecho internacional sobre el proceso en México,

que sin él nunca hubiera emprendido este largo camino para realizar una tesis doctoral, pues él

fue el motor principal y la fuente de inspiración todo este tiempo. A él lo considero, con todo

respeto, mi padre adoptivo en el derecho internacional privado y un gran amigo.

Asimismo, este trabajo de investigación no hubiera sido posible sin el apoyo de la Biblioteca

del Palacio de la Paz en La Haya (Peace Palace Library), tan rica e inagotable en sus fuentes como