Protección laboral en los Estados Unidos. Trabajo irregular en Nueva York

• DOI: http://doi.org/10.1111/j.1564-9148.2008.00029.x
• Author: Siobhán McGRATH,Annette BERNHARDT,James DeFILIPPIS
• Date: 01 June 2008
• Published date: 01 June 2008

Revista Internacional del Trabajo, vol. 127 (2008), núm. 2-3

Copyright © Organización Internacional del Trabajo 2008

Protección laboral en los Estados Unidos.

Trabajo irregular en Nueva York

Annette BERNHARDT*, Siobhán MCGRATH**

y James DEFILIPPIS***

Resumen. Gracias a un conjunto de datos originales acopiados de 2003 a 2006, los

autores estudian el alcance del incumplimiento del derecho laboral en la ciudad de

Nueva York y los tipos de infracción principales. El trabajo irregular —esto es, el que

quebranta las normas vigentes— es muy común en toda una serie de ramos donde

abundan los salarios bajos, y se ha extendido al calor de una mezcla de factores eco-

nómicos y de decisiones políticas de los poderes públicos. La solución, según sostie-

nen los autores, consiste en reforzar la vigilancia del cumplimiento de la ley y en

regular los nuevos regímenes de empleo surgidos al hilo de los cambios acaecidos

en la organización de la producción y del trabajo.

a ciudad de Nueva York nos sirve de ventana por la que asomarnos para co-

L nocer la situación de los dispositivos de protección que tienen los trabaja-

dores de los Estados Unidos. En el presente artículo sostenemos que cada vez es

más frecuente la vulneración de las leyes del trabajo fundamentales promulga-

das el siglo pasado. Como veremos, estas infracciones —que denominamos «tra-

bajo irregular»— suceden en ramos y profesiones de toda la economía de la

ciudad. No se trata de casos de explotación aislados y que duren poco; antes

bien, constatamos que el incumplimiento sistemático de las leyes laborales ame-

naza con devenir la manera de actuar habitual de los empleadores sin escrúpu-

los. Hemos documentado el fenómeno en los ramos de bajos salarios, pero cada

vez ejerce más presión en las empresas que se hallan en estratos superiores de la

escala salarial, con el riesgo de que sigan su ejemplo. Hacer frente con todas sus

consecuencias a esta franja del mercado laboral en auge es un quehacer de suma

importancia y que está íntimamente unido a la lucha contra la propagación de

* Proyecto Nacional de Derecho del Empleo, Nueva York, dirección electrónica: abernhardt

@nelp.org. ** Instituto de Política y Gestión del Desarrollo, Universidad de Manchester. *** Es-

cuela Edward J. Bloustein de Planeamiento y Política Pública, Universidad Rutgers, dirección

electrónica: jdefilip@rci.rutgers.edu. El presente artículo es una selección de pasajes del libro de

Bernhardt, McGrath y DeFilippis (2007). Los autores agradecen el generoso apoyo recibido de la

Fundación Rockefeller, la Fundación Russell Sage y el Fondo J.M. Kaplan.

La responsabilidad de las opiniones expresadas en los artículos sólo incumbe a sus autores,

y su publicación en la Revista Internacional del Trabajo no significa que la OIT las suscriba.

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los puestos de trabajo de mala calidad en pleno siglo XXI y a la difícil tarea de sa-

tisfacer las necesidades de los trabajadores de bajos salarios y de los inmigrantes,

así como las de sus familias.

Durante los últimos años, los investigadores y defensores de esta causa han

empezado a documentar el mundo, a menudo espantoso, de la explotación labo-

ral en ciudades y pueblos de todo el territorio de los Estados Unidos. Se trata,

por lo general, de estudios monográficos de estamentos concretos de trabajado-

res o de ramos o enclaves particulares de inmigrantes. Lo que todavía nos falta,

empero, es una investigación completa del alcance de los abusos en el mundo del

trabajo, en qué ramos se cometen más, las distintas estrategias empresariales

que abocan a la comisión de infracciones y los trabajadores más afectados por el

problema. Por todo ello hay un vacío informativo que entorpece gravemente la

adopción de respuestas políticas eficaces, lo mismo en el ámbito federal que en

el estatal o en el local.

Al término de tres años y medio de intensa labor de campo, los autores del

presente artículo hemos cartografiado, por vez primera, el paisaje del trabajo

irregular en la ciudad de Nueva York. Empezaremos por dar una breve defini-

ción del «trabajo irregular» y exponer los tipos de infracciones que hemos detec-

tado en el curso de nuestra investigación y los ramos y las profesiones en que

eran más frecuentes. A continuación dibujaremos el perfil de tres ramos —el co-

mercio de alimentos al por menor, los taxis y la atención sanitaria a domicilio—

para mostrar con más detalle los métodos de los empleadores que producen el

trabajo irregular y las condiciones laborales a que dan lugar. Después estudiare-

mos las relaciones entre los trabajadores y los intermediarios, tras lo cual pasare-

mos a analizar los factores que impulsan el trabajo irregular y las consecuencias

que pueden extraerse en lo referente a la política pública.

Los métodos, los datos y la frecuencia del fenómeno

El presente estudio es fruto de investigaciones primarias y secundarias llevadas

a cabo en la ciudad de Nueva York entre 2003 y 2006. Desde el comienzo, nues-

tro equipo tuvo que superar varios obstáculos: los trabajadores que desempeñan

puestos de trabajo irregulares están muchas veces indefensos y es difícil llegar

hasta ellos; los empleadores son reacios a dar a conocer las infracciones de la le-

gislación laboral; y no es fácil redactar las preguntas sobre las prácticas seguidas

en materia de trabajo, ni contestar a ellas. Frente a esta situación, nuestra estra-

tegia consistió en «triangular» la información desde ángulos múltiples para iden-

tificar, describir y analizar el trabajo irregular.

La base fundamental de los datos usados son las entrevistas a fondo reali-

zadas a 326 personas. Primero, escudriñamos la economía de la ciudad en busca

de pruebas iniciales de la existencia de trabajo irregular entrevistando a perso-

nas que conocían a fondo determinados ramos. Acto seguido, nos concentramos

en trece ramos en donde aparecían indicios repetidos de trabajo irregular, y en-

trevistamos a todos los interesados directos valiéndonos de remisiones en cade-

na y de contactos independientes unos de otros. Nuestra labor de campo consis-

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tió en entrevistas individuales, el estudio de grupos de trabajadores y las

prospecciones geográficas (en las que delimitamos zonas concretas de la ciudad,

por ejemplo, una franja comercial o un distrito manufacturero, y llevamos a cabo

entrevistas directas e improvisadas con propietarios, gerentes y trabajadores

dondequiera que pudimos hacerlo). Usamos siempre protocolos de entrevistas

semiestructuradas para cada tipo de partícipe: trabajadores, empleadores, agen-

tes oficiales, sindicalistas, analistas políticos, proveedores de servicios jurídicos y

sociales, y asociaciones comunitarias1.

También recogimos datos de diversas fuentes secundarias. Elaboramos una

base de datos integrada por centenares de documentos procedentes de diarios y

revistas, publicaciones de los ramos económicos, asociaciones empresariales y re-

vistas académicas. Acopiamos, por ejemplo, anuncios de organismos oficiales so-

bre los casos resueltos de infracciones laborales; datos de los ramos que nos sir-

vieron para conocer las tendencias económicas; estudios universitarios de ramos

o poblaciones de trabajadores clave; y reportajes periodísticos de investigación

acerca de los problemas que nos interesaban. Además, hicimos un inventario ex-

haustivo de los estudios en que se estima la frecuencia de las infracciones labora-

les y nos acogimos a la Ley de Libertad de Información para conseguir datos acer-

ca de las actividades de vigilancia del cumplimiento de las leyes y de represión de

las infracciones que realiza el Ministerio de Trabajo de los Estados Unidos (véan-

se McGrath, 2005, y Bernhardt y McGrath, 2005). Por último, usamos datos de

la Oficina del Censo y de la Oficina de Estadísticas Laborales de los Estados

Unidos sobre la composición sectorial y la población trabajadora de la ciudad

de Nueva York.

La frecuencia de las infracciones de la legislación del trabajo

Las vulneraciones de la legislación laboral son todavía un campo de investigación

muy poco explorado, y actualmente hay pocas estimaciones globales de su fre-

cuencia. Las pruebas más sólidas que hasta ahora tenemos proceden de una serie

de encuestas rigurosas sobre la observancia de las leyes por parte de los emplea-

dores que realizó el Ministerio de Trabajo estadounidense a finales del decenio

de 1990. Por ejemplo, se constató que, en 1999, sólo el 35 por ciento de las fábricas

de prendas de vestir de la ciudad de Nueva York respetaban las leyes sobre retri-

bución y jornada de trabajo; la cifra de los restaurantes de Chicago era del 42 por

ciento y la de las tiendas de comestibles de Los Ángeles del 43 por ciento; en todo

el país, nada más cumplían estas leyes el 43 por ciento de los hospitales y residen-

cias sanitarias (Ministerio de Trabajo, 2001). Lamentablemente, las encuestas

mencionadas se limitaban a un puñado de ramos y regiones, y han dejado de rea-

lizarse; con todo, muestran nítidamente que en determinados ramos es habitual

que se conculquen las disposiciones de salario mínimo y jornada de trabajo.

1Muchos nos dieron información sobre más de un ramo; en promedio, hicimos treinta y

nueve entrevistas por ramo.