Estigmatizaci

AuthorRuiz, Sandra Montoya
  1. INTRODUCCIÓN

    Desde el fin de la Guerra Fría, el mundo ha presenciado dos tendencias en ascenso que son subexploradas en Relaciones Internacionales RI (1). La primera, se caracteriza por el uso de estigmas (2) para promover que los Estados cumplan normas y valores en el sistema internacional; en la segunda, el despliegue de diplomacia cultural por parte de Estados asociados al estigma, en el marco de su postura de contra-estigmatización, rechazo o aceptación del estigma. A la escasa literatura que aborda el estigma en RI, a la carencia de investigaciones sobre la diplomacia cultural desplegada en el marco del estigma, se suman la centralización de la literatura existente, producida y divulgada principalmente desde Alemania, Estados Unidos, Francia y Reino Unido. No obstante, desde inicios del siglo XXI crece gradualmente el interés sobre diplomacia cultural como objeto de estudio en y sobre el Sur Global en RI.

    La estigmatización internacional es un proceso discursivo frente a "otro', y opera a partir de la definición de desviación que se contrasta con una normalidad o un deber ser. Se trata de un proceso intersubjetivo que produce y sostiene desigualdades y está anclado en historias y narrativas de prejuicio y exclusión (Alder, 2014). A lo largo de la historia, se encuentran casos de Estados, naciones y comunidades que han sido constituidos como infractores o desviados, acudiendo a etiquetas como "pícaros',"parias',"bárbaros',"incivilizados'. Desde la segunda mitad del siglo XX a estas etiquetas y estigmas se suman las de "fallidos', "narcotraficantes/narco-estados', "violadores de derechos humanos', "terroristas'.

    Los procesos de estigmatización tienen implicaciones en el día a día de ciudadanos con nacionalidades estigmatizadas, entre ellas, la selectiva restricción a la movilidad internacional según la nacionalidad, en la que se generan dos tipos de ciudadanos, los que tienen pasaportes "poderosos' (3) y los de pasaportes "débiles'. Los primeros pueden moverse libremente por más del 81 % de los 195 países reconocidos por las Naciones Unidas, mientras que los segundos solo pueden hacerlo en el 24 % de los 195 países. Los pasaportes débiles provienen usualmente de Estados rotulados como "foco de amenazas a la paz, seguridad y estabilidad internacional'.

    Este artículo se aproxima al despliegue de diplomacia cultural de Chile, Cuba y Colombia, en el marco del estigma asociado a la violación de los derechos humanos a inicios de la Posguerra Fría. El documento se divide en tres partes, en la primera se aborda el status emergente del estigma en las RI, y el estigma asociado a la violación de los derechos humanos. En la segunda, se enfatiza la diplomacia cultural en relación al estigma, y algunas complejidades asociadas a la Guerra Fría en Latinoamérica. En la tercera, se abordan elementos de los tres casos, entre ellos, la circulación del estigma, contextos y políticas exteriores en los que se enmarcan las iniciativas de diplomacia cultural desplegadas. Así, se recorrerán las posturas estatales aceptación del estigma adoptada por Chile en el proceso de transición a la democracia, contra-estigmatización adoptada por Cuba en el escenario post-soviético y bajo el bloqueo de Estados Unidos, y la postura rechazo del estigma adoptada por Colombia, durante el escalona-miento del conflicto armado interno, del narcotráfico y de la presión internacional en la lucha mundial contra las drogas. Al final se comparten algunos interrogantes que sigo indagando.

  2. ESTIGMA EN RI

    Aproximarse al campo del estigma en RI, y a la diplomacia cultural como posible respuesta a este en América Latina, contribuye a visibilizar la importancia de los roles de estigmatiza-dor y estigmatizado, de normales y desviados en la construcción del orden internacional, y sus relaciones con la diplomacia cultural, por seis motivos: i) la construcción de la sociedad internacional ha tenido lugar a través de la estigmatización de Estados "trans-gresores' y que violan las normas, y sus formas de lidiar con el estigma (Adler-Nissen, 2014); ii) el uso de procesos de estigmatización no ha sido cuestionado en las corrientes dominantes de RI; iii) Este uso fomenta que la percepción de normalidad en el sistema internacional sea impartida por estándares de los estigmatizadores, usualmente occidentales (Zarakol, 2014); iv) las imágenes de los países, las identidades estereotipadas y los símbolos culturales que son estigmatizados internacionalmente, pueden convertirse en preocupaciones de seguridad nacional para gobiernos y sus diplomacias (Villanueva, 2011); v) los procesos de estigmatización generan respuestas violentas y no violentas, siendo opacadas las no violentas como la diplomacia cultural; vi) analizar cómo se despliega la diplomacia cultural en el marco del estigma, amplía el entendimiento de las relaciones internacionales y las interacciones que su uso genera, permite visibilizar su carácter no violento (4) (Donfried, 2015).

    A pesar de sus implicaciones, hay poca literatura en RI, situación que contrasta con las robustas investigaciones sobre estigma que se ven en psicología social (Adler-Nissen, 2014), sociología, estudios de paz y estudios culturales. Mientras tanto, se observan diversos casos de Estados constituidos internacionalmente como infractores o desviados, "pícaros", "parias', "infractores de la ley', "bárbaros', "incivilizados', etiquetas a las que se suman de manera creciente desde el fin de la Guerra Fría, las de "fallidos', "narcotraficantes/narco-estados", "violadores de derechos humanos' y "terroristas'. Casos, en los que además ocurren despliegues de diplomacia cultural enmarcados por el estigma, que siguen desatendidos en las RI.

    Al revisar la literatura en RI, encontramos una interesante emergencia de análisis enfocados en la interacción entre actores que imponen un comportamiento "normal" -estigmatizadores- y los que son constituidoscomo transgresores, desviados, estigmatizados (Adler-Nissen, 2016). Tenemos también estudios que resaltan la necesidad de analizar el papel de los estigmatizados. Aunque el manejo del estigma como decisión estatal ha sido poco estudiado en RI, hay sugestivas aproximaciones desde la teoría social de la identidad y el interaccionismo social rescatado por la tercera generación de constructivistas (Adler-Nissen, 2016). En la teoría social de la identidad, el manejo del estigma se relaciona con la búsqueda de protección de autoestima colectiva; mientras que para constructivistas de tercera generación este manejo se relaciona con el que se le da a la vergüenza. Al recorrer la escasa y dispersa literatura que aborda estigmas internacionales, pueden identificarse los siguientes trece: i) atrasados-inferiores-retrasados; ii) tirano; iii) comunista; iv) financiador de terrorismo-terrorista; v) xenofóbico; vi) amenaza al orden democrático; vii) narcoestado-narcotraficante-productor de narcóticos; viii) violador de derechos humanos; ix) imperialista-belicista; x) robótico-desalma-do-mecánico; xi) destino turismo sexual y prostitución infantil; xii) Estado canalla, y xiii) Estado fallido.

    Los procesos de estigmatización internacional afectan a los estigmatizados más allá de una simple incomodidad por las críticas externas. Como enfatiza Goffman (1963), cualquier identidad, atributo o comportamiento puede ser estigmatizado a partir de atributos desacreditadores e incongruentes que sean distantes del estereotipo del tipo ideal de ser. Manejar el estigma y adoptar una de las tres posturas como decisión de Estado, representa un desafío que no solo involucra la lucha por lograr un mejor reconocimiento y status frente a otros, sino también relaciones con su propio pasado y conflictos domésticos, los cuales a su vez están moldeados por el mundo exterior (Adler-Nissen, 2016). Tomadores de decisión, en representación de los Estados, encarnan diversos desafíos en los contextos doméstico e internacional, en sus interconexiones, del manejo del estigma se desprenden dilemas éticos que se relacionan no solo con lograr un reconocimiento internacional adecuado, no estigmatizado, sino las relaciones de este proceso con problemáticas sociales, económicas, políticas y culturales que tienen lugar en sus sociedades.

    A partir del modelo de Goffman, Adler-Nissen (2014) aborda tres posturas usadas por Estados para manejar el estigma. En la postura de aceptación o reconocimiento del estigma, se identifica y acepta la falta cometida que dio lugar al estigma, el Estado busca resarcir sus errores y se disculpa por su conducta/atributo transgresor, mostrando una resignificación de sí mismo. Alemania y Sudáfrica son dos ejemplos de esta postura, sus Estados reconocieron los errores del pasado, propiciaron la construcción de memoria histórica, resignificaron su imagen internacional alineada con el nuevo escenario. Otro ejemplo de aceptación es Chile a inicios de la Posguerra Fría, en medio de la efervescencia e incertidumbre trazada por el proceso de la transición a democrática post-dictadura. En la segunda postura, contra-estigmatización, los Estados convierten el estigma en un emblema de orgullo, deciden evidenciar la estigmatización como estrategia de los estigmatizadores, cuya legitimidad cuestionan; en esta postura se busca ser percibido como víctima y que el estigmatizador sea cuestionado internacionalmente, como sucede en el caso de Cuba. En la tercera postura, rechazo del estigma, los estigmatizados aceptan las categorías de desviación, pero niegan ser diferentes a los que viven en la norma; buscan pasar como normales y evitar ser sancionados, como sucede en el caso de Austria (Adler-Nissen, 2014), su Estado se autoreconoce como estigmatizado en la Unión Europea por las actitudes que tiene su extrema derecha, ofrece explicaciones de por qué no debería ser etiquetado como "transgresor', y centra su narrativa en ser discriminado. Otro ejemplo de esta postura de manejo del estigma es Colombia a inicios de la Posguerra Fría.

    ...

To continue reading

Request your trial

VLEX uses login cookies to provide you with a better browsing experience. If you click on 'Accept' or continue browsing this site we consider that you accept our cookie policy. ACCEPT